“Ambos países se sienten víctimas de las sanciones y la hegemonía estadounidenses”, dijo ayer Clément Therme, experto iraní de la Universidad Sciences Po en París al diario holandés NRC Handelsblad. El presidente Trump está acercando a Irán y Venezuela. Es una cuestión de supervivencia para ambos países”.
Para este profesor las sanciones son las que hacen que Venezuela e Irán estrechen lazos, por lo tanto, concluiría el desprevenido, sino hubiesen sanciones no hubiese acercamiento que implicara una amenaza a EEUU. Es la tipica falacia de “causa falsa” que originaron los demócratas en EEUU para atacar a Trump, entre ellos economistas como Mark Weisbrot, Jaffrey Sachs y Dean Baker del Center for Economic and Policy Research (CEPR); Darren Walker y Javier Ciurlizza de la Fundación Ford; Patrick Gaspardy de la Fundación Open Society y otros locales como Francisco Rodríguez, quienes aseguran que son las sanciones a Pdvsa las causantes de la crisis humanitaria que sufre la nación venezolana. Ocultan deliberadamente que Venezuela es el país con menores libertades económicas del planeta; que tiene el mayor Índice de Corrupción en América y el Caribe y el quinto en el mundo; que entre 2010 y 2020, junto a Libia, Siria, Mali y Yemen, Venezuela es uno de los 5 países del mundo que se han hecho más frágiles, que según el índice Doing Business 2020 del Banco Mundial, Venezuela es el tercer peor lugar del mundo para hacer negocios.
Que la misión de la ONU, encargada de investigar las ejecuciones extrajudiciales, las desapariciones forzadas, las detenciones arbitrarias y las torturas y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes cometidos desde 2014, concluyó en septiembre 2020 que tanto el gobierno, como los agentes estatales y los grupos que trabajaban con ellos han cometido violaciones flagrantes de los derechos humanos en ese país. El informe del grupo de expertos indicó que Nicolás Maduro y los ministros del Interior y de Defensa tenían conocimiento de los crímenes.
Pero volvamos a la relación con Irán. Hugo Chávez viajó a Teherán diez veces antes de su muerte en 2013; el ex presidente iraní Mahmoud Ahmedinejad visitó Venezuela siete veces. Solo hasta 2012, ambos países firmaron no menos de 300 acuerdos de cooperación entre ellos. Todo ello en los períodos presidenciales de Barak Obama. No ha sido Trump el causante de ese acercamiento.
Al respecto escribí en detalle sobre la relación Venezuela-Irán el 30 de abril de 2020: “La fea historia de las petroleras iraníes en Venezuela”
@morandavid
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