En simultáneo con el anuncio del presidente Alberto Fernández el lunes sobre su intención de restablecer plenamente las relaciones diplomáticas con el régimen de Nicolás Maduro, la Cancillería venezolana envió al Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina la solicitud de beneplácito para Stella Marina Lugo Betancourt como nueva embajadora de Venezuela en Buenos Aires, así lo reseñó MONITOREAMOS.
Lugo ya fungía desde 2019 como encargada de negocios en la embajada en Argentina, pero su designación oficial como embajadora ha generado controversia por sus polémicos antecedentes.
El diputado y presidente de la Coalición Cívica ARI, Maxi Ferraro, consideró “vergonzoso” que el Gobierno argentino otorgue reconocimiento a la representante de Maduro, destacando que “posee vínculos con Irán y su familia tiene vinculaciones en casos de corrupción, tráfico de drogas y oro en el Caribe”.
Por su parte, el diputado del partido Propuesta Republicana (PRO), Waldo Wolff, denunció que Stella Lugo tiene “fuertes vínculos con Irán y está vinculada su familia a resonantes casos de corrupción y violencia contra la oposición”.
Wolff advirtió que la aceptación de la exgobernadora chavista como embajadora de Venezuela “afianza el lado oscuro” de las relaciones exteriores de Argentina, algo que calificó como “lamentable”.
Es que Argentina ha sido víctima de dos ataques terroristas en los que se acusa de estar involucrados a actuales funcionarios del régimen iraní. El primero de ellos contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires, ocurrió el lunes 18 de julio de 1994 y dejó 85 personas asesinadas y 300 heridas. El segundo ataque fue contra la Embajada de Israel en Argentina el 17 de marzo de 1992 y causó 29 muertos y más de 200 heridos.
Por eso, el vínculo de Stella Lugo con Irán genera tanta controversia. En abril de 2019, cuando ejercía como Ministra de Turismo del régimen de Maduro, Lugo promovió un pacto con Mahan Air, una controvertida aerolínea iraní, sancionada por Estados Unidos transportar armas y terroristas.
La también integrante de las Milicias Bolivarianas forma parte de un clan familiar que junto a su marido, Jesús Montilla, gobernó por 17 años el estado Falcón.
Miembros de la familia Montilla-Lugo han sido acusados de diversos casos de corrupción y por presuntamente estar vinculados a una organización criminal de tráfico de drogas y oro a islas del Caribe. En 2019, el entonces presidente de la Subcomisión de Lucha Antidroga, Antiterrorismo y Delincuencia Organizada de la Asamblea Nacional (AN), diputado José Luis Pirela, acusó a Noel Lugo y Carlos Betancourt, hermano y primo respectivamente de Stella Lugo, de haber entregado concesiones a supuestos negocios turísticos en el archipiélago de Los Roques, pero que en realidad operarían como una fachada de un esquema de narcotráfico y el traslado de minerales, mientras la ahora embajadora ejercía como jefa de Gobierno del Territorio Insular Francisco de Miranda, que administra dicho archipiélago.